Y eso es precisamente lo que se está haciendo en estos días, prácticamente en todas las clases, tanto de infantil como de primaria: desde contar la historia que gira alrededor de dicho personaje (maravilloso recurso de cara a los más pequeños) hasta profundizar en el tema con otros recursos y materiales que apoyan el trabajo emocional (la dinámica del ovillo de lana, por ejemplo). A continuación os dejamos con algunas imágenes del trabajo que se viene realizando en las aulas, que se irán ampliando en próximos días:
¿Y quién es ese monstruo? Pues... un personaje sencillo y divertido que no sabe lo que le pasa. Se ha hecho un lío con las emociones y ahora le toca deshacer el embrollo. Con él, de manera muy gráfica (usando el color como eje central del relato), niñas y niños aprenden a identificar las distintas emociones y expresar su sentir.
Un excelente punto de partida para profundizar posteriormente en este terreno. En los siguientes enlaces se puede ampliar el tema, acceder a otros recursos sobre el cuento y ver cómo abordarlo en clase o, incluso, en casa:
- Cuentos para crecer.
- Aula de Elena.
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